La próxima llegada de Richard Duke Buchan III como nuevo embajador de los Estados Unidos en Marruecos ha vuelto a poner sobre la mesa varias cuestiones clave en las relaciones bilaterales, entre ellas la esperada apertura de un consulado estadounidense en la ciudad de Dajla, en el sur del Reino.

Buchan, empresario y diplomático vinculado al Partido Republicano, es conocido por su cercanía al presidente Donald Trump, quien lo apoyó directamente para este cargo. Durante su audiencia ante el Senado estadounidense, el diplomático subrayó su conocimiento profundo de Marruecos, país que ha visitado en numerosas ocasiones a lo largo de más de cuarenta años.

Desde Rabat, la designación ha sido recibida con atención y cierto optimismo, especialmente considerando que el anuncio inicial sobre la apertura de la representación consular en Dajla fue hecho en diciembre de 2020, en el marco del reconocimiento por parte de Washington de la soberanía marroquí sobre el Sáhara.

Este reconocimiento, aunque mantenido por la administración de Joe Biden, no ha venido acompañado hasta ahora de medidas diplomáticas visibles sobre el terreno. El nombramiento de Buchan podría representar una oportunidad para reactivar ese compromiso, considerado por Marruecos como un paso simbólicamente importante en la consolidación de la posición internacional del país respecto a su integridad territorial. En efecto, la apertura de una misión diplomática en Dajla no se percibe únicamente como un acto administrativo, sino como una señal política clara de respaldo a los esfuerzos de Marruecos por alcanzar una solución realista y duradera al conflicto regional. En la actualidad, más de 40 países han abierto consulados en las ciudades de El Aaiún y Dajla, en lo que Rabat considera una validación creciente de su plan de autonomía como única base seria y creíble para resolver la disputa.

Una decisión similar por parte de Washington reforzaría no solo el posicionamiento marroquí, sino también la dimensión estratégica de la asociación entre ambos países.

Por el momento, no se ha anunciado una agenda oficial del nuevo embajador, pero se espera que asuma sus funciones en las próximas semanas. En este contexto, la evolución de este expediente será observada de cerca tanto por los actores políticos marroquíes como por la opinión pública, en un momento en que la región del Sáhara se ha convertido en un eje prioritario de la política exterior del Reino.

Publicado el : 5 de agosto de 2025

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